Afortunada

Estaba en mi habitación mirando la última foto que nos habíamos sacado juntos antes de él se marchara para cumplir su sueño de ser actor, su sonrisa estaba en su rostro y lo hacia más hermoso de lo normal, bueno, era hermoso pero aun asi, lo era… como lo extrañaba.

-Hija tienes visitas- escuche como mi madre me llamaba desde el salón.

Baje con una sonrisa en mi rostro, porque cada vez que lo recordaba, me sentía feliz y me hacia pensar que pronto estaría aquí. Recordar sus ojos esmeralda, su cuerpo el cual era perfecto y lo perfecto que era, me hacia suspirar.

-¿Quién te hace suspirar asi?- pregunto esa voz que no escuchaba hace tres meses, me quede paralizada en el ultimo escalón de la escalera.
-¿Kev?- pregunte aun con mi vista en el suelo.
-¿Quién mas podia ser?- contra pregunto.

Dijo eso y en menos de cinco minutos lo tenia preso entre mis brazos, lo mire a sus ojos, tenían el mismo brillo que cuando se fue, ese brillo que me enamoraba mas de él.

-Estas hermoso- hable y le di un pequeño beso.
-Tu también- me sonrio- te extrañe- acoto.
-Yo también, pero sabes que te apoyo en todo- nuevamente lo bese.

Nos quedamos viendo televisión en el salón de mi casa, mi madre había salido con unas amigas y por lo tanto estábamos solos.

-Princesa- hace tiempo que no estaba sus palabras dulce hacia mi persona- quiero
hacerte una propuesta-dijo.
-¿Cuál?-pregunte nerviosa.
-Kate- suspiro y acaricio mi mejilla- quiero que seas mia- escupió son tapujos.

Sentí mis mejillas coloradas, que mi corazón se había paralizado para luego latir
muy fuerte que sentía que se me salía del pecho.

-¿estas seguro?- pregunte mirándolo a los ojos.
-Claro que si, Kate- me sonrio- además quiero que te vayas a vivir conmigo – nuevamente me declaro muerta.

No se en que momento, sentí sus grandes manos acariciando mi cintura, sentía como en cada caricia mi cuerpo, este se estremecía por el contacto.

Subimos a mi habitación entre besos y caricias, que se hacían muy apasionadas a medida que el tiempo pasaba.

Mi polera comenzó a salir de su lugar, una vez que ingresamos a mi habitación, sentir sus manos calientes, me hacia sentir la necesidad de sentir su piel sobre la mia, asi que casi arranque casi a tirones su hermosa polera roja, que le sentaban tan bien.

-Te amo –susurro sobre mis labios para capturarlos de forma apasionada. Ambos sentíamos que nuestras ropas estorbaban, asi que fueron sacadas de su lugar, sentir como sus manos jugaban con mis pechos, como me llenaba de éxtasis al solo sentir sus caricias, me hizo pensar que tenía que tomar el control del asunto.

Saque sus pantalones, llene de besos su cuello y pecho, se sentía el calor que ambos cuerpo expulsaban, me sentía tan afortunada de tenerlo a mi lado, que nunca me cansaría de amarlo.

Solo sentí un pinchazo en mi interior, cuando luego de haber sacado la totalidad de nuestras prendas, Kev se había acomodado entre mis piernas.

Sentir con éramos uno me hizo recordar todo lo que habíamos pasado, juntos, de lo afortunada que era de estar a su lado y siempre le entregaría todo el amor que tenia hacia él.

...

Ahora recuerdo todo lo que vivi en esa semana en que Kevin volvio a buscar, ahora lo tengo a mi lado, formando la familia que siempre quise...

Tome mi antiguo diario y escribi..

Soy tan afortunada de tener
una segunda piel para recorrer,
contigo nacen las caricias y palabras
nuestra verdad , nuestro lugar